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13/09/2010 / Barcelona

Barcelona recordó la figura de Salvador Allende cuarenta años después de su elección como presidente chileno

El 11 de septiembre, Diada Nacional de Catalunya, lleva indisolublemente unido el nombre y el recuerdo de Salvador Allende. También este año, el Ayuntamiento de Barcelona, a través del distrito de Horta – Guinardó,  convocó, y con mayor motivo, un acto de homenaje a Salvador Allende Gossens,  en la plaza que lleva su nombre situada en el barrio del Carmel, para celebrar el 40º aniversario de su elección democrática como presidente de Chile. Y la plaza Salvador Allende se llenó.

Entre las autoridades presentes, Joan Saura, conseller de Interior, Relaciones Institucionales y Participación de la Generalitat de Catalunya; Jordi Hereu, alcalde de Barcelona, y Elsa Blasco, concejal del distrito de Horta – Guinardó, donde está ubicada la plaza Allende. El acto de recuerdo se inició con unas palabras a cargo de Andreu Mayayo.  Los parlamentos de las autoridades tuvieron, como denominador común, el recuerdo al compromiso social de Salvador Allende, su trabajo en beneficio de las clases más desfavorecidas de la sociedad, por la libertad y la mejora de los trabajadores y la necesidad de preservar su memoria, tanto por su manera de vivir y actuar desde el gobierno como por la dignidad con la que afrontó su muerte. Joan Saura realizó un paralelismo entre Allende y Lluís Companys, el president màrtir de la Generalitat fusilado por el franquismo, remarcando lo que unió a ambos mandatarios, “el compromiso social, democrático y por la libertad”, en palabras del dirigente de Iniciativa per Catalunya – Els Verds. En su alocución,  Saura también tuvo un recuerdo de ánimo para los 33 mineros atrapados que esperan rescate en Chile.  Como era de esperar, ante la plaza llena de admiradores del recordado presidente chileno, el momento más emotivo de la jornada, sin duda, se vivió con la emisión por megafonía de las últimas palabras de Salvador Allende (1), registradas horas antes del asalto a la residencia presidencial del Palacio de la Moneda de Santiago de Chile por parte de los militares golpistas, encabezados por Augusto Pinochet, en la idéntica fecha del 11 de septiembre, pero de 1973, día en que el presidente Allende puso fin a su vida antes que tener de ceder el poder a los rebeldes. Los asistentes cantaron el himno nacional de Chile, Els Segadors y Venceremos. El homenaje siguió con una ofrenda floral al busto de Salvador Allende y la  actuación del grupo Sakapatú. El acto, del que pueden ver imágenes en la galería de fotos adjunta, contó con el apoyo del Centro Salvador Allende, de la Asociación de Apoyo a las Organizaciones Populares Chilenas (Asopxi) y de Casa Amèrica Catalunya.  (1) Parte final de la última alocución de Salvador Allende a Radio Magallanes, el 11 de septiembre de 1973:“…Siempre estaré junto a ustedes. Por lo menos, mi recuerdo será el de un hombre digno que fue leal a la lealtad de los trabajadores.El pueblo debe defenderse, pero no sacrificarse. El pueblo no debe dejarse arrasar ni acribillar, pero tampoco puede humillarse.Trabajadores de mi patria: tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo, donde la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre para construir una sociedad mejor.¡Viva Chile! ¡Viva el pueblo! ¡Vivan los trabajadores!Éstas son mis últimas palabras y tengo la certeza de que mi sacrificio no será en vano. Tengo la certeza de que, por lo menos, habrá una lección moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición”.