El musicólogo Fernando González Lucini ha recopilado en nueve discos-libro el reconocimiento a los músicos latinoamericanos emigrados o exiliados en España durante los años 70 del siglo pasado. Se trata de la colección “El canto emigrado de América Latina”, que reúne las voces de Manuel Picón, Olga Manzano, Indio Juan, Quintín Cabrera, Rafael Amor, Claudina y Alberto Gambino, Carlos Montero y Gonzalo Reig, en un ejercicio de memoria y recuperación de la importante aportación cultural realizada por estos cantautores. Uno de ellos, Quintín Cabrera, ha asistido a la presentación de esta iniciativa a pesar de su delicado estado de salud –padece fibrosis pulmonar y está a la espera de un transplante-. El trovador uruguayo ha emocionado a los presentes -entre ellos, los cantautores catalanes Marina Rossell, Ramon Muntaner o Joan Isaac- cuando ha leído unas “décimas” donde desdramatiza su situación actual: “la muerte no me da miedo: temo a no seguir viviendo”, ha dicho.
Emotivo homenaje al cantautor Quintín Cabrera durante la presentación de la colección “El canto emigrado de América Latina”
Quintín Cabrera, de 64 años de edad, participa en la colección con un disco nuevo, tras veinte años de no registrar nuevas composiciones. El trabajo, titulado “Naufragios y Palimpsestos”, incluye un tema, “Hotel Luna”, interpretado conjuntamente con Luis Eduardo Aute. Combativo a pesar de tener que convivir con el oxígeno que necesita suministrarse periódicamente, Cabrera ha reivindicado su ideología comunista. “La izquierda se ha dejado secuestrar por la derecha y sufre de Síndrome de Estocolmo”, ha afirmado secundando a González Lucini, quien ha sentenciado: “Los cantautores latinoamericanos han sufrido muy especialmente la marginación y el olvido y no los conocen en su país... y tampoco aquí”. La colección “El canto emigrado de América Latina”, proyecto impulsado por la Fundación Autor, la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) y Casa Amèrica Catalunya, les reivindica ahora.