Sobre los restos de la Barcelona de hace 300 años, en el Centro de Cultura y Memoria El Born, Juan Martín Guevara ha reivindicado la vigencia del legado de su hermano el Che. “Hay que trasladar el pensamiento del Che. Los problemas de injusticia, opresión y desigualdades persisten”, ha dicho en un acto organizado por Casa Amèrica Catalunya.
25/04/2017 / Barcelona
Juan Martín Guevara reivindica el legado de su hermano el Che
En este solemne escenario, acompañado por Gerardo Pisarello, primer teniente de Alcaldía del Ayuntamiento de Barcelona, y Antoni Traveria, director general de Casa Amèrica Catalunya, Juan Martín Guevara ha presentado su libro Mi hermano el Che (Alianza Editorial) con el que rompe con décadas de silencio.
“En mi familia la cobardía no existía”, ha proclamado en alusión a la determinación y empuje del icónico líder revolucionario, asesinado hace 50 años en Bolivia. “El Che era generoso y duro a la vez. Dejó escrito que hay que endurecerse sin perder la ternura. Esto es muy llamativo de su ser profundo”, ha explicado.
En conversación con Pisarello y Travería, Juan Martín Guevara, empapado de los tres mil escritos que dejó su hermano, ha destacado la capacidad de crítica y autocrítica del Che. “Nos alertaba para que el capitalismo no nos comiera la cabeza. Pero tampoco le gustaba la Unión Soviética. En 1965 ya predijo que la URSS regresaría al capitalismo”, ha manifestado.
El Che y Fidel
“Entre Fidel Castro —líder junto a Ernesto Guevara de la triunfante revolución cubana de 1959— y el Che había admiración mutua y también diferencias”, ha señalado.
Interpelado por el numeroso público congregado en El Born, Juan Martín Guevara no cree en las teorías que apuntan a un interés de Castro en deshacerse del Che y recuerda que Fidel había reprochado a su hermano que pusiera en riesgo su vida con sus acciones guerrilleras en África y América Latina.
El pequeño de los Guevara –15 años más joven que el Che— estuvo preso en Argentina más de 8 años, antes y durante la última dictadura militar en su país. Firme partidario del guevarismo, ha afirmado: “El socialismo real no resolvió los problemas pero el capitalismo los agrava. Tenemos que enfrentarlo sin enmascaramientos”.
“Hoy el Che estaría en primera línea de lucha. Su asesinato fue la derrota de un proceso revolucionario latinoamericano”, ha añadido.
“Equivocado o no, el Che fue consecuente. Dio su vida por ese ideal. Esa autenticidad es muy importante”, ha subrayado Gerardo Pisarello.
