Entre 800 y 1.200 bolivianos están llegando todos los días a España y los vuelos entre La Paz y Madrid se han multiplicado por cinco. Este espectacular flujo migratorio del país andino hacia la península ibérica es producto del hecho que, a partir del domingo 1 de abril, cualquier ciudadano boliviano que quiera entrar a España deberá exhibir un visado expedido por el consulado español. Hasta ese día, los bolivianos aún podrán llegar a España como turistas, circunstancia que ha facilitado que muchos se acaben quedando en el país de forma ilegal una vez caducados los tres meses de estancia que su presunto estatus de visitantes les otorga. “La visa es un mal necesario”, admite Elsa Oblitas, presidenta del Centro Boliviano Catalán. (En la imagen, recreación del carnaval de la ciudad boliviana de Oruro en Casa Amèrica Catalunya)
La inminente exigencia de un visado de entrada provoca un alud de llegadas de bolivianos a España
Entre 800 y 1.200 bolivianos están llegando todos los días a España y los vuelos entre La Paz y Madrid se han multiplicado por cinco. Este espectacular flujo migratorio del país andino hacia la península ibérica es producto del hecho que, a partir del domingo 1 de abril, cualquier ciudadano boliviano que quiera entrar a España deberá exhibir un visado expedido por el consulado español. Hasta ese día, los bolivianos aún podrán llegar a España como turistas, circunstancia que ha facilitado que muchos se acaben quedando en el país de forma ilegal una vez caducados los tres meses de estancia que su presunto estatus de visitantes les otorga. “La visa es un mal necesario”, admite Elsa Oblitas, presidenta del Centro Boliviano Catalán.
El Gobierno español justifica la medida para frenar la constante llegada de inmigrantes irregulares procedentes del país andino. De hecho, la boliviana es la comunidad extranjera que más ha aumentado su presencia en España en los últimos meses. Al respecto, la presidenta del Centro Boliviano Catalán, Elsa Oblitas, califica el visado de “mal necesario” y apuesta por un control de la emigración, ya que asegura que las agencias de viajes venden unas condiciones que no son ciertas y “todo no es tan bonito, los bolivianos padecemos mucha discriminación”. Oblitas asegura que hay otras formas de entrar en España como, por ejemplo, los visados de trabajo, pero “los bolivianos omiten esta opción”. Por otra parte, también se extremarán las medidas en la expedición de la visa turística, que solicitará una serie de requisitos “casi imposibles de conseguir” como presentar un seguro de vida de treinta mil euros. La iniciativa ha provocado que miles de bolivianos se amontonen a las oficinas de inmigración y a las agencias de viaje para conseguir el visado y el billete de avión antes de la fecha límite. “Hemos detectado que las agencias de viajes han vendido más pasajes de los permitidos y en los aeropuertos bolivianos hay 1.200 personas esperando embarcar con destino a España”, señala Oblitas. Durante estos días, la llegada de vuelos procedentes de La Paz al aeropuerto madrileño de Barajas se ha multiplicado por cinco, lo que significa unas 1000 personas al día. “Las dos compañías bolivianas que hacen el vuelo directo La Paz-Madrid, y que volaban una vez a la semana, ahora lo hacen cinco”, ha dicho Alberto Navarro, Secretario de Estado español para Asuntos Europeos. A partir del 1 de abril, Bolivia se añadirá a la lista de 133 países cuyos ciudadanos necesitan un visado para entrar en la Unión Europa. Entre estos países se encuentran Colombia, Cuba, Ecuador, Perú, la República Dominicana y Haití.