Unas 300.000 personas en Cuba y otras 30.000 en México han sido evacuadas ante la inminente llegada del huracán Wilma, calificado de “el más potente de la historia del Océano Atlántico” por el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de los Estados Unidos. A pesar de que Wilma ha perdido algo de fuerza en las últimas horas al pasar de la categoría cinco a la cuatro, sus efectos se prevén igualmente devastadores.
21/10/2005 / Barcelona
Más de 300.000 personas evacuadas en Cuba y México ante la inminente llegada de Wilma, el huracán más potente de la historia del Atlántico
Unas 300.000 personas en Cuba y otras 30.000 en México han sido evacuadas ante la inminente llegada del huracán Wilma, calificado de “el más potente de la historia del Océano Atlántico” por el Centro Nacional de Huracanes (CNH) de los Estados Unidos. A pesar de que Wilma ha perdido algo de fuerza en las últimas horas al pasar de la categoría cinco a la cuatro, sus efectos se prevén igualmente devastadores.
Se espera que el huracán Wilma toque tierra en las próximas horas tras su avance errático de las últimas horas. En Cuba, las autoridades han evacuado a unas 300.000 personas y han declarado la alarma ciclónica en Pinar del Río, La Habana, Ciudad de La Habana y en Isla de la Juventud, las áreas que previsiblemente resultarán más afectadas. Las lluvias asociadas al huracán ya han causado graves daños en las provincias del oriente cubano.
En México, se ha decretado la alerta roja en las costas del Caribe y se ha evacuado a unas 30.000 personas en Isla Mujeres y en el municipio de Cancún, donde se hospedan unos 10.000 turistas. Fuentes diplomáticas han informado que unos 3.500 turistas españoles se hospedan en la zona. Las autoridades también han cerrado los puertos.
En Estados Unidos esperan la visita de Wilma para el domingo. El Centro Nacional de Huracanes ha advertido que si el huracán alcanza las costas estadounidenses con categoría tres o cuatro, la pérdida de vidas podría ser como la provocada por su antecesor, el devastador Katrina.
La fuerza del Wilma ha sido recatalogada como de categoría 4 aunque no se descarta que aumente de intensidad y recupere la categoría 5, la máxima en la escala de medición Saffir-Simpson. El huracán se traslada a unos 13 kilómetros por hora con vientos máximos sostenidos de cerca de 250 kilómetros por hora, y con ráfagas incluso más fuertes.
