El ex dictador chileno Augusto Pinochet “sobresimuló” su enfermedad para que ésta “pareciera más grave” cuando en realidad “es una persona normal que puede dar respuestas”. Es el extracto más relevante del dictamen médico encargado por la Corte Suprema de Chile sobre el estado de salud del anciano militar que, en el último asalto del combate mantenido con la justicia para evitar sentarse en el banquillo de los acusados, podría haber recibido, paradójicamente, el golpe definitivo a su inmunidad. (en la imagen, el juez chileno Juan Guzmán, que abrió el proceso judicial a Pinochet y que siempre ha reiterado que el ex dictador está en condiciones de ser juzgado, durante la entrega del Premio Joan Alsina –dedicado a un sacerdote catalán asesinado por el régimen de Pinochet– que le ha concedido el Ayuntamiento de Barcelona)
Pinochet no está demente y puede enfrentarse a un juicio
El ex dictador chileno Augusto Pinochet “sobresimuló” su enfermedad para que ésta “pareciera más grave” cuando en realidad “es una persona normal que puede dar respuestas”. Es el extracto más relevante del dictamen médico encargado por la Corte Suprema de Chile sobre el estado de salud del anciano militar que, en el último asalto del combate mantenido con la justicia para evitar sentarse en el banquillo de los acusados, podría haber recibido, paradójicamente, el golpe definitivo a su inmunidad.
Hasta ahora, el equipo de abogados que asiste a Pinochet había esquivado el procesamiento del ex dictador alegando su senilidad. Los informes médicos encargados por la justicia chilena desvirtúan ahora esta estrategia al señalar que si bien Pinochet padece “una demencia subcortical, eso no implica una enajenación mental que le impida enfrentarse a un proceso judicial”, informa la agencia EFE.