Son diseñadores argentinos asentados desde hace décadas en Barcelona que han creado escuela. Juan Carlos Pérez Sánchez, conocido como America Sanchez (sin acentos); Ricardo Rousselot y Mario Eskenazi son autores de muchas marcas identificativas de empresas e instituciones imprescindibles en el imaginario colectivo de los catalanes. Casa Amèrica Catalunya los ha reunido en una mesa redonda dentro de las jornadas “Publicidad y diseño latinoamericanos”. Con el Auditorio de la entidad repleto de público, los diseñadores han hablado sobre su evolución profesional y personal y han constatado que los tiempos actuales quizás no son los mejores. “Barcelona tiene cosas mucho más interesantes que el diseño”, ha dicho America Sanchez.
“Barcelona tiene cosas más interesantes que el diseño”, dice America Sanchez en un debate marcado por lo autocrítica con los también diseñadores argentinos Ricardo Rousselot y Mario Eskenazi
Son diseñadores argentinos asentados desde hace décadas en Barcelona que han creado escuela. Juan Carlos Pérez Sánchez, conocido como America Sanchez (sin acentos); Ricardo Rousselot y Mario Eskenazi son autores de muchas marcas identificativas de empresas e instituciones imprescindibles en el imaginario colectivo de los catalanes. Casa Amèrica Catalunya los ha reunido en una mesa redonda dentro de las jornadas “Publicidad y diseño latinoamericanos”. Con el Auditorio de la entidad repleto de público, los diseñadores han hablado sobre su evolución profesional y personal y han constatado que los tiempos actuales quizás no son los mejores. “Barcelona tiene cosas mucho más interesantes que el diseño”, ha dicho America Sanchez.
Tiempos actuales
“A partir de 1992 se inició la crisis y el declive del diseño, aumentada con el fenómeno de la globalización y la venta de las grandes empresas a corporaciones extranjeras”, ha explicado Ricardo Rousselot, que ha añadido: “hay que pasar un examen a diario. Y cada día hay que buscar nuevas empresas para volver a tener el esplendor de antes”. America Sanchez, por su parte, ha sostenido que el diseño actual de usar y tirar es sólo una “moda” y se ha mostrado muy crítico con las escuelas de diseño: “las escuelas de diseño de Barcelona van a por dinero, a conseguir más alumnos. Están muy comercializadas. Doy clases puntuales pero me escapo porque no me encuentro a gusto”, ha admitido. “Las escuelas privadas de diseño españolas siempre han tenido pésimos programas de estudio”, ha secundado Mario Eskenazi.
Inicios
Sobre sus inicios en Barcelona, America Sanchez ha explicado que llegó a la ciudad condal a finales de los años 60 “porque se me habían acabado los lugares donde estar”. Mario Eskenazi recuerda que su intención era viajar a Nueva York pero su destino cambio gracias a America Sanchez: “me ofreció trabajar juntos en Barcelona. Duramos tres meses pero gracias eso estoy aquí”, ha manifestado. Ricardo Rousselot, por su parte, decidió salir del caos en que se había convertido Argentina bajo el mandato de Isabel Perón. “Fui a Madrid pero al final preferí Barcelona gracias a una foto de Cadaqués (pueblo de la Costa Brava catalana, fuente de inspiración permanente del pintor surrealista Salvador Dalí)“.
FuturoEn este contexto, America Sánchez, tras recordar que “la publicidad es persuasión y el diseño información. El trabajo de los diseñadores es de gran responsabilidad porque lo ve mucha gente”, ha anunciado su próxima retirada. “En octubre ciero el quiosco. Me voy a dedicar a dar charlas y a dibujar”, ha dicho. Rousselot ha replicado inmediatamente a su colega: “No pienso dejar de trabajar. ¿Qué hago jubilado? Aunque sí me gustaría estar preso para poder hacer caligrafía tranquilo”, ha ironizado. Eskenazi, por su parte, se ha reafirmado en sus principios: “cuando trabajo pienso en los usuarios y no en el cliente”.