El presidente de la Asamblea Provincial de Matanzas, Reynold Miguel Díaz, ha calificado la recuperación de la ermita de Montserrate de "sueño de los 'matanceros' hecho realidad". La restauración del edificio, construido hacia 1850 por la "Sociedad de Beneficiencia de los naturales de Cataluña y las Islas Baleares" en honor a la Virgen de Montserrat, ha sido posible gracias al apoyo de la Fundación Casa Amèrica Catalunya. A partir de ahora, la ermita de Montserrate funcionará como un centro cultural con programación estable. Con motivo de la presencia en Cuba de "La huella catalana en el Caribe", ya acoge una exposición y un audiovisual de Casa Amèrica Catalunya sobre "La Fiesta de la Colla", una celebración local de raíces catalanas. "En el momento que vi la ermita y conocí la "Fiesta de la Colla", tuve claro que desde Casa Amèrica Catalunya teníamos la responsabilidad de no olvidarnos de esta parte de catalanidad que hay en Cuba", ha explicado Marta Nin, adjunta a dirección de la entidad. (En la imagen, de derecha a izquierda, Marta Nin, Reynold M. Díaz y el director del Instituto Ramon Llull, Josep Bargalló, en la ermita de Montserrate)
Casa Amèrica Catalunya, a través del programa "La huella catalana en el Caribe", hace realidad la restauración de la ermita de Montserrate en Matanzas, Cuba
El director del Instituto Ramon Llull (IRL), coorganizador de "La huella..." con Casa Amèrica Catalunya, Josep Bargalló, ha destacado que la ermita "era un símbolo para los catalanes y baleáricos que vivían y viven aquí. Su recuperación reúne historia y voluntad de futuro". Igualmente, ha recordado el gran número de catalanes que en los siglos XVIII y XIX se marcharon a Cuba:"algunos se hicieron ricos y más tarde invirtieron esta fortuna en Catalunya". "A menudo no somos lo bastante conscientes de lo que le debemos a este país", ha añadido.El presidente de la Asamblea Provincial de Matanzas, Reynold Miguel Díaz, por su parte, ha subrayado los fuertes vínculos existentes entre Matanzas y Catalunya, que se evidencian en las más de 200 tumbas con apellidos catalanes que hay en el cementerio de la ciudad.La jornada ha acabado con dos actuaciones musicales. En primer lugar, el músico de Vilanova i la Geltrú, Simó Busquets, ha interpretado diversas piezas del folclore catalán y balear con el ‘sac de gemecs’ (saco de gemidos), el ‘flabiol’ (flautín) y el tamboril. Entre ellas, el 'Virolai', 'Montañas del Canigó' y 'Para tocar caminando'. Finalmente, el Coro de Matanzas ha cantado un variado repertorio iniciado con ‘El cant dels ocells’ ('El canto de los pájaros')."La huella catalana en el Caribe", concebida como un programa bianual -este año ha pasado por República Dominicana, Puerto Rico y Cuba-, continuará en 2010 con diversas actividades en Catalunya.