En el marco de los desayunos literarios de Casa Amèrica Catalunya, el escritor argentino Marcelo Birmajer ha calificado su última obra, “Historia de una mujer” (Editorial Seix Barral), de “antinovela rosa”. Birmajer, presentado por la directora editorial de Seix Barral, Laura Ramírez, como el “Woody Allen argentino”, ha cosechado una carrera literaria de notable envergadura con la trilogía “Historias de hombres casados”, “Nuevas historias de hombres casados” y “Últimas historias de hombres casados”, senda que da un giro copernicano en su última obra donde relata, en una “aproximación parecida a la de una telenovela” la odisea vital de la protagonista, Isabel Masalvi, una “joya” de 40 años que ha alcanzado su cota máxima de belleza justo antes de iniciar su decadencia.
El escritor argentino presenta en Casa Amèrica Catalunya “Historia de una mujer”, su “anti-novela rosa”
Con su estilo desenfadado, Birmajer escruta las relaciones hombre-mujer a partir del “rol destructivo” ya recogido en la propia Biblia u Otello de la belleza de la protagonista de “Historia de una mujer”. “No hay mujer tan atractiva y perdurable como Isabel, deudora de actrices como Ava Gardner, Monica Belucci o Natalia Kimsky”, ha descrito. “Lo que deslumbra, desde el punto de vista masculino, es la belleza física. Los piropos siempre están destinados a someter y humillar a la portadora de la belleza”, ha explicado el escritor porteño de origen judío. “Historia de una mujer” pervierte todos los ingredientes de una novela rosa. Nadie mata por amor. El amor es siempre una excusa, incluiso en Romeo y Julieta”, ha añadido. Birmajer ha explicado que la novela surgió en estado de “embriaguez literaria” tras una sinopsis de página y media sobre el acoso moral por encargo de una productora de cine. “Tratando de ir a las Indias llegué a América”, ha señalado el escritor –galardonado hace unos años con el Oso de Plata del Festival de Berlín y en la Mostra de Cine Latinoamericano de Lleida por el guión de “El abrazo perdido”- quien ha asegurado que su planteamiento siempre fue el de hacer una novela. Por ello, ha precisado que en mi humor sí hay la marca de Woody Allen, pero no en mi literatura. Mis libros no se le parecen en nada y me lo tomo como una referencia para invitar a su lectura”. Birmajer, escritor muy popular en Argentina por “mi temperamento de sujeto vulgar de clase media”, ha apuntado la existencia de similtudes “no buscadas, furtivas y vistas a posteriori” entre su país e “Historia de una mujer”: “la opulencia indestructible de Isabel y los tipos de hombres que la acosan: autoritarios(por los militares), pusilánimes (por el ex presidente de la Rúa) o que no saben qué hacer con el poder (por Carlos Menem)”. Y también se ha referido a Cristina Fernández, la presidenta de Argentina que ha relevado en el cargo a su marido Néstor Kirchner: “en mi país es muy importante deponer ambiciones personales para fortalecer el sistema democrático”.
