¿Cómo abordar la reconstrucción de Haití después del brutal terremoto que ha provocado 300.000 muertos? Las respuestas a esta pregunta han adoptado forma de solemne compromiso de implicación de la cooperación catalana en el futuro del país caribeño más allá de la situación de emergencia provocada por el “desastre natural más letal de la reciente historia”, según palabras del director general de Casa Amèrica Catalunya, Antoni Traveria. A su lado, en la rueda de intervenciones, Manel Vila, comisionado de Cooperación Internacional, Solidaridad y Paz del Ayuntamiento de Barcelona; David Minoves, director general de Cooperación al Desarrollo y Acción Humanitaria de la Generalitat de Catalunya; Eduard Sanjuan, periodista desplazado a Haití para cubrir la tragedia, y Marc-Antoine Archer, cónsul de Haití en Barcelona y testimonio presencial del seísmo a Puerto Príncipe, quién ha sintetizado el espíritu del encuentro: “Me gustaría que con la excusa del terremoto se construyesen puentes y vínculos entre Catalunya y mi país”.
La cooperación catalana se compromete en Casa Amèrica Catalunya a volcarse en la reconstrucción de Haití
Marc-Antoine Archer no ha escondido su decepción por el hecho de que Catalunya no considere a Haití como país prioritario en materia de cooperación. “Catalunya no se ha implicado en mi país por falta de tradición histórica y de vínculos. La única intervención es en casos de emergencia”, ha dicho para subrayar que el gran reto es ahora “la reconstrucción, sobre todo, de las instituciones haitianas”. En este sentido, el cónsul ha apostado por la creación de redes intermunicipales “que vayan más allá de los hermanamientos entre ciudades” en un contexto que permita superar “40 años de fracasos de la cooperación internacional en Haití” y “tratar de forma justa, por una vez, a mi país”.David Minoves, por su parte, ha señalado que la Generalitat valora impulsar la construcción de viviendas, de acuerdo con las indicaciones de las autoridades locales, en lo que sería la primera actuación de post-emergencia de la administración catalana en el país caribeño. “Nosotros no somos nadie para “salvar” Haití. Debemos ser más humildes”, ha remarcado el responsable de la cooperación catalana. “Estamos comprometidos a trabajar en la reconstrucción, rehabilitación y prevención de vulnerabilidades y riesgos”, ha añadido.Manel Vila, en nombre de la cooperación del Ayuntamiento de Barcelona, ha tenido una intervención marcada por la autocrítica: “Se respondió a la emergencia, pero a menudo nos olvidamos que es preciso ayudar a las instituciones haitianas para convertir la tragedia en oportunidad” y ha anunciado una propuesta en el marco de la Unión Mundial de Ciudades (CGLU) para que a partir de Montreal –ciudad hermanada con Puerto Príncipe- se colabore “en la reconstrucción de la ciudad con un nuevo planeamiento urbanístico”. “Es preciso dotar las instituciones haitianas de personal de mando para que vuelvan a funcionar”, ha añadido Vila.Eduard Sanjuan, finalmente, ha descrito cuál era el panorama del país pocos días después del terremoto: “La destrucción era impresionante, brutal. Era lo más cercano al apocalipsis, como todo el Ensanche de Barcelona destruido”. “Haití es un pueblo que, con plena dignidad, intenta sobrevivir”, ha concluido el director del prestigioso programa de documentales“30 Minuts”, de TV3, Televisión de Catalunya.
