Desde el 26 de agosto, el Instituto Cervantes de Frankfurt muestra al público alemán “Ausencias”, del fotógrafo argentino Gustavo Germano y auspiciada por Casa Amèrica Catalunya. La exposición fue inaugurada por Juan L. Garibaldi, cónsul argentino acreditado en la ciudad; Mercedes de Castro, directora de la sede local del Instituto; Marta Nin, directora de cultura y exposiciones de Casa Amèrica Catalunya y el propio Germano. A punto de cumplir los tres años de vida expositiva, “Ausencias” no ha perdido ni un solo ápice de su enorme fuerza y calado humano.
La exposición 'Ausencias' impacta al público de Frankfurt
A lo largo de estos tres últimos años, de “Ausencias” lo hemos dicho y escrito prácticamente todo, basta con repasar nuestro propio archivo de noticias. Que Frankfurt la acoja ahora en el Instituto Cervantes, lleno y expectante en el día de su estreno con más de 150 personas abarrotando dicha sede, añade apenas otro hito a su carrera de éxitos.
Esa iglesia protestante se abrió en 1789, el año de la Revolución Francesa, fue la sede del primer Parlamento de Frankfurt y, por seguir en una síntesis de urgencia sobre su densa historia, resultó destrozada durante los bombardeos aliados de la Segunda Guerra Mundial. Una vez reconstruida, se decidió que sus muros albergarían cultura de paz y allí, al margen de grandes exposiciones y actos, se entrega anualmente el Premio de la Paz que se concede dentro del programa integrado en la Feria del Libro de Frankfurt, la joya de la corona de las artes por la que hoy es conocida esta urbe teutona en todo el planeta.
Tampoco resulta casual que “Ausencias” prolongue su estancia durante la celebración de esta auténtica cumbre literaria, ya que el país invitado en la edición del 2010 no es otro que Argentina y las fotografías de Gustavo Germano las protagonizan los desaparecidos, víctimas de su dictadura militar. Ni es de extrañar el significativo respaldo que los medios de comunicación de Frankfurt, y por extensión los alemanes, brindaron al acto de inauguración de “Ausencias” en el Instituto Cervantes, detalle de su sensibilización ante las noticias relacionadas con los derechos humanos.
Precisamente, el próximo jalón del recorrido mundial de esta singular muestra será suizo, ya que “Ausencias” visitará Ginebra a partir del 30 de septiembre el llamado El Jardín de los Desaparecidos de aquella ciudad, así bautizado en recuerdo a las víctimas del terror de estado allá donde se haya producido, donde compartirá espacio público, dentro de una exposición colectiva, con la obra de Martín Acosta “ADN” y la de Helen Zout, “Huellas de desapariciones”.
Seis días antes, habrá terminado su tiempo de visita a Frankfurt, donde también se comunicó el interés de Roma por recibirla antes de que acabe el 2010. En el acto y durante los parlamentos de presentación, Marta Nin definió la muestra afirmando que “Ausencias conmueve, remueve, provoca, hiere en lo profundo, sintoniza con el público en una frecuencia universal”, mientras Germano recordaba que “las Madres de la Plaza de Mayo fueron las primeras que empezaron a usar las fotografías para confirmar que esas personas desaparecidas existieron". Apenas unas personas entre las 30.000 víctimas directas en esos siete años de horror.